Calorcito y piscina dos imprescindibles del verano que os traemos en esta boda tan fresquita. Colores pastel para las damas de honor, y amarillo para las flores. Un decoración con aires rústicos, integrada en el entorno con ramas y troncos de arboles. Un estilo sencillo, como nos gusta a nosotras...
Me encanta esta idea, si contáis con una piscina en el lugar de vuestra boda no lo dudéis! También podríamos aplicarlo a fuentes, quedaría genial!
Enamorada de este corner, con una replica de la Victoria de Samotracia, una de mis estatuas preferidas.
Otro detalle que me gusta mucho es el ganchillo, le tengo mucho cariño a este tipo de artesanía, y ademas creo que dulcifica mucho la mesa. Junto con la madera de la base del centro de mesa crean un conjunto muy romántico.
Cuando llega el calor, creo que celebrar las bodas alrededor de playas, lagos, piscinas... son opciones perfectas para refrescar los meses más cálidos del año.
Espero que os haya gustado!
Nos leemos.